Homilía del Domingo 30 de Agosto

El Padre Máximo exhortó a los presentes a hacer una revisión de nuestras actitudes a la luz de las lecturas de este Domingo 22º durantre el año.
Después de varios domingos que se meditó sobre el Evangelio de Juan, hoy se retoma la lectura del Evangelista regente para el Ciclo B, San Marcos.
Jesús, muy duro con los fariseos de su época tratándolos de hipócritas por prestar sólo atención a los ritos y gestos externos, nos dice también a nosotros hoy que lo que contamina al hombre no es lo que entra sino lo que sale del corazón de cada uno.
El celebrante comenzó recordando "lo que realmente es importante, la pureza de corazón, que es lo que Dios mira realmente de nosotros". Explica luego que "el verdadero sentido de los preceptos y leyes que Moisés dió a su pueblo eran para que el hombre recordara y los reprodujera también hacia su interior. Pero ellos se quedaron en los ritos meramente externos, y creían que cumpliendo con eso ya estaban justificados, e incluso seguían agregando otros, por las dudas". Señalando la cita que el mismo Jesús hace de Isaías: ´Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mi. Las doctrinas que enseñan no son sino preceptos humanos`, remarca las muchas veces que "nosotros también nos conformamos con cumplir externamente, y ese cumplimiento no es siempre reflejo de nuestro interior. Lo que nos pide hoy el Señor es que revisemos un poco nuestro interior: qué culto le ofrecemos nosotros a Dios.
Más adelante pidió que "en nuestra manifestación en la vida cotidiana debemos tratar de vivir eso que celebramos el domingo". Al finalizar sentenció: "¿Por qué en la Argentina, si la enorme mayoría somos bautizados católicos y cristianos, existe tanta injusticia, tanta maldad? Porque en el fondo todavía nuestro corazón no se ha convertido sinceramente. Es el corazón del hombre el que está enfermo, dice un documento que los obispos nos dejaran un tiempo atrás. Entonces, las injusticias en la Argentina provienen del corazón de los hombres, no es de las estructuras simplemente, es del corazón de cada uno de nosotros. En la medida que se convierta el corazón de cada uno, eso influye después en el plano social".