
Con el Lema "Libertad religiosa, camino para la paz", el Santo Padre Benedicto XVI se dirige a todo el mundo en este primer día del año 2011, al celebrarse la Jornada Mundial por la Paz, en su 43º edición desde su institución en el año 1968.




encuentro del Señor dejando atrás todos los pecados, todos los vicios y debilidades, y amar al Señor con todo el corazón. Por eso la preparación de la Navidad tiene que ser muy concreta en buscar obras de caridad, de misericordia que comúnmente no hacemos. No podemos seguir conformándonos con la tibieza, con lo que siempre hacemos por miedo a lo que otros dirán. La Segunda Lectura nos invita a tener los mismos sentimientos de Jesús. Jesús nunca estuvo en un más o menos, se jugó en todas las circunstancias.”
lograr este fin. En la oración oficial, el Breviario, en el Invitatorio de Maitines, llama a sus ministros a adorar "al Rey que viene, al Señor que se acerca", "al Señor que está cerca", " al que mañana contemplaréis su gloria". Como Primera Lectura del Oficio de Lectura introduce capítulos del profeta Isaías, que hablan en términos hirientes de la ingratitud de la casa de Israel, el hijo escogido que ha abandonado y olvidado a su Padre; que anuncian al Varón de Dolores herido por los pecados de su pueblo; que describen fielmente la pasión y muerte del Redentor que viene y su gloria final; que anuncian la congregación de los Gentiles en torno al Monte Santo. La Segunda Lectura del Oficio de Lectura en tres Domingos están tomadas de la octava homilía del Papa San León (440-461) sobre el ayuno y la limosna como preparación para la venida del Señor, y en uno de los Domingos (el segundo) del comentario de San Jerónimo sobre Isaías 11:1, cuyo texto él interpreta referido a Santa María Virgen como "el renuevo del tronco de Jesé". En los himnos del tiempo encontramos alabanzas a la venida de Cristo como Redentor, el Creador del universo, combinados con súplicas al juez del mundo que viene para protegernos del enemigo. Similares ideas son expresadas los últimos siete días anteriores a la Vigilia de Navidad en las antífonas del Magnificat . En ellas, la Iglesia pide a la Sabiduría Divina que nos muestre el camino de la salvación; a la Llave de David que nos libre de la cautividad; al Sol que nace de lo alto que venga a iluminar nuestras tinieblas y sombras de muerte, etc. En las Misas es mostrada la intención de la Iglesia en la elección de las Epístolas y Evangelios. En las Epístolas se exhorta al creyente para que, dada la cercanía del Redentor , deje las actividades de las tinieblas y se pertreche con las armas de la luz; que se conduzca como en pleno día, con dignidad, y vestido del Señor Jesucristo; muestra como las naciones son llamadas a alabar el nombre del Señor; invita a estar alegres en la cercanía del Señor, de manera que la paz de Dios, que sobrepasa todo juicio, custodie los corazones y pensamientos en Cristo Jesús; exhorta a no juzgar, a dejar que venga el Señor, que manifestará los secretos escondidos en los corazones. En los Evangelios la Iglesia habla del Señor que viene en su gloria; de Aquel en el que, y a través del que, las profecías son cumplidas; del Guía Eterno en medio de los Judíos; de la voz en el desierto, "Preparad el camino del Señor". La Iglesia en su Liturgia nos devuelve en espíritu al tiempo anterior a la encarnación del Hijo de Dios, como si aún no hubiera tenido lugar. El Cardinal Wiseman ha dicho:

En el Evangelio de hoy (Lc 20, 27-38) Jesús responde a los saduceos cómo es el Cielo, del cual, incluso en nuestros días, tenemos una imagen equivocada. “Nuestra razón limitada, dijo el Padre Javier en su homilía, no nos permite comprender el estado de seres espirituales en presencia de Dios”.
“Jesús continúa con su catequesis sobre la oración, su importancia y el modo de orar”, comienza diciendo el P. Javier en su homilía del día. “En este Evangelio de Lucas (18, 9-14) Jesús responde a esa pregunta que el domingo pasado dejaba planteada “Cuando venga el Hijo del hombre ¿encontrará fe sobre la tierra?”, y lo importante aquí es cómo vivimos esa fe.”
Puso un poco de agua en el bebedero del perro y sacó el gato al balcón, cerró la puerta con llave y apagó la luz de la entrada.
El P. Ricardo, en una brillante homilía a la Luz del Evangelio que refiere a la necesidad de una oración perseverante abandonados en la fe, preponderó el rol fundamental de las madres en nuestras vidas, nuestros hogares, nuestra sociedad.
“Jesús, en su camino a Jerusalén donde va a morir, va encontrándose con distintos personajes de los cuales Lucas tomas las relaciones y diálogos y los mezclas con las enseñanzas”, comienza diciendo en su homilía el P. Javier.
Este domingo 3 de octubre integrantes de la Comunidad de Conivencia recibirán, en la Santa Misa de la hora 9:00, el Envío Misionero con el cual se dá inicio a una Misíon que realizarán en nuestro Barrio con motivo de celebrarse el Mes Misionero.
La Iglesia Católica vive el mes de octubre dedicado mundialmente a despertar el Espíritu Misionero en los fieles, con gestos de solidaridad hacia los 200,000 misioneros que entregan sus vidas por el anuncio del Evangelio en el mundo.
El Evangelio de hoy, Lc 16 1-13, correspondiente al 25º Domingo del Ciclo C ha sido siempre motivo de diversas interpretaciones.
Mons. Gustavo E. Podestá, en el año 1983 decía: "Era costumbre admitida en Palestina el que los administradores tuvieran alguna ganancia ‘extra', anotando en los recibos –como hoy hacen muchos jefes de compra o de venta en las empresas- más cantidad de lo que de hecho prestaban. Como el interés estaba prohibido por la ley mosaica era una manera de sacar ganancia sobre el capital tanto para el dueño como para el que mediaba el negocio. Lo que hace el administrador en nuestro relato al bajar la suma de lo prestado a cifras más reales es tener, por fin, un acto de honestidad".
Pedido de Publicación.
El P. Javier, en la Homilía de hoy, 24º Domingo durante el año, se desmenuzó muy didácticamente las tres parábolas más significativas que se relatan en el Evangelio de san Lucas (15, 1-32). Significativas en el sentido que muestran claramente quién es Dios de boca del mismo Dios Hombre: Dios es pura Misericordia, es infinitamente Amor.
“Humildad es andar en verdad, es descubrir la verdad y vivirla de esa manera”, comenzó diciendo el P. Sergio hoy en su homilía, conforme a las Lecturas del día (Eclo 3, 17-29; Heb 12, 18-24 y Lc 14, 7-14) que invitan a que “cuando más grandes seas, más humilde debes ser.”